Una excelente respuesta del sector del enoturismo es la característica que define la primera edición de FINE, Feria Internacional de Enoturismo, promovida por la Feria de Valladolid celebrada durante los días 12 y 13 de febrero.
En la misma participaron un centenar de bodegas, territorios y empresas especializadas, así como compradores procedentes de quince países.
“El punto de partida eran las 1.400 entrevistas de trabajo programadas antes del inicio de la feria, una cifra que se ha incrementado durante el desarrollo de la feria, cumpliendo así el objetivo que nos habíamos marcado: hacer de FINE un centro de negocios para las empresas”, ha destacado el director general de la Feria de Valladolid, Alberto Alonso.
FINE apuesta por un formato de contenidos profesionales “que iremos consolidando en próximas ediciones. Creemos que es un modelo de éxito y seguiremos trabajando en esa línea para la convocatoria de 2021”, añadió Alonso.
FINE ha recibido durante estas dos jornadas cerca de un millar de visitantes, una cifra acorde con las previsiones estimadas dado el carácter exclusivamente profesional de los colectivos a los que va dirigida la feria.
“Uno de los aspectos en los que hemos incidido ha sido en el objetivo de hacer de FINE una cita para el enoturismo internacional y contar con la presencia de 25 bodegas portuguesas, cinco rutas y compradores procedentes de quince países, es un buen comienzo”, añade Alberto Alonso.
FINE es un proyecto de la Institución Ferial de Castilla y León respaldado por el Ayuntamiento de Valladolid, la Junta de Castilla y León y la Diputación de Valladolid, que ha contado con el apoyo inicial de las bodegas Yllera, Protos, Pago de Carraovejas, Matarromera y Abadía Retuerta.
La segunda edición de la Feria Internacional de Enoturismo se celebrará en 2021.